Mapa de Movilidad en Bicicleta de Pamplona y Barañain y sus Puntos Peligrosos

domingo, 12 de febrero de 2017

PAMPLONA: ATROPELLOS 8-80

¿Qué está pasando últimamente en nuestra ciudad con los accidentes de tráfico? Los periódicos nos anuncian, día sí, día también, decenas de accidentes de tráfico en Pamplona. Sin ir más lejos, esta semana han habido 2 muertos por asuntos relacionados con el tráfico. Cada día que voy a trabajar nos pasan por emisora un mínimo de 2 atropellos a peatón por tarde, además de infinidad de golpes entre coches. De momento vamos unos 4 muertos en menos de 1 año. Estas cifras son de pánico. Esta ciudad, lejos de ser 8-80, es de atropellos tanto a los niños de 8 como a los ancianos de 80.

¿Hay alguna causa para este aumento en los accidentes de tráfico en general, y de los atropellos a peatones en particular?

Digamos que hay múltiples factores que suman a la bola de nieve de los accidentes, y que cada día hacen que estos aumenten:

1.- Conservación de la vía pública
Desde que llegó la crisis, y ya desde la última legislatura de Barcina, se ha venido detectando una bajada en la inversión en conservación de las calles. Al ya conocido abandono de las vías ciclistas de la ciudad se ha ido sumando una merma considerable en los reasfaltados y parcheos de las calzadas urbanas. Cada vez se reasfalta peor, más a petachos y menos calles enteras. Y los parcheos son de menor grosor, más irregulares y que se deterioran con más facilidad. La consecuencia de esto es que el firme es cada día más irregular, con más baches, más complicado para los vehículos a dos ruedas, y en especial para las bicis que no cuentan con tanta capacidad de suspensión. Los baches, parches y diferencias de cota son caldo de cultivo para el agua y el hielo, cambian el agarre de los neumáticos de un tipo de asfalto a otro y hacen más complicada la conducción y el frenado.


Juan XXIII, ejemplo de calzada multipetacho
2.- Concepto de ciudad cochista
Desde el último cambio sustancial que ha sufrido Pamplona, en la época de Barcina, con la bulevarización (que no peatonalización) de Carlos III, se apostó por introducir el vehículo privado hasta el corazón de la ciudad. Se construyeron aparcamientos subterráneos por todas las esquinas, especialmente en el centro, permitiendo el libre acceso del coche a todos los rincones de la ciudad. Además, la implantación de la zona azul, buscando una rotación en el estacionamiento de los vehículos, hizo aumentar el tráfico en las zonas más exitosas de la ciudad. Apenas se eliminaron estacionamientos en superficie para los coches, ni se llevaron a cabo peatonalizaciones o pseudopeatonalizaciones, exceptuando el Casco Viejo. No ha habido ninguna medida orientada a disminuir el tráfico privado en la ciudad en los últimos 25 años, todo lo contrario. Tampoco se ha intervenido en la velocidad, a pesar de que más de media ciudad está señalizada con limitación a 30Km/h, limitación que no se cumple en prácticamente ninguna calle, porque sólo señalizaron, no cambiaron el diseño de la calle para impedir desarrollar altas velocidades. Salvo en Marcelo Celayeta, uno de los pocos puntos de la ciudad en los que es imposible ir rápido con el coche, aunque quieras.
El coche siempre ha sido el 1 en la escala de prioridades en esta ciudad, y de momento no parece que haya cambiado este concepto de protagonismo urbano. Pamplona es la única ciudad del entorno en el que el tráfico motorizado privado ha aumentado en los últimos años (crisis incluida).
Avenida Marcelo Celayeta, ejemplo de diseño que impide físicamente a los motorizados alcanzar velocidades altas

3.- Visibilidad de pasos de peatones
Derivado de la supremacía cochista en la ciudad sobreviene este problema. Apenas se ha actuado en una decena de pasos de peatones para aumentar su visibilidad. Seguimos viendo pasos peatonales con coches aparcados hasta el borde mismo, en batería para más INRI, que impiden una correcta visión del peatón que va a pasar por parte del motorizado. Todos nos hemos pegado algún susto conduciendo un vehículo cuando nos ha salido "de repente" un peatón de la nada, pues la poca visibilidad del paso nos deja poca capacidad de maniobra.
El ayuntamiento no ha estado nunca dispuesto a eliminar plazas de aparcamiento contiguas a pasos peatonales para aumentar su visibilidad. Como mucho han cambiado una plaza en batería por una en línea, medida insuficiente si el vehículo que aparca en línea es una furgoneta, por ejemplo.


Benjamín de Tudela (arriba) y calle Iturrama (debajo), dos claros ejemplos de aparcamientos hasta el mismo borde del paso de peatones, que impiden la correcta visión del peatón que está pasando

4.- Semáforos intermitentes con el de peatones en verde
Otro problema mortal que tenemos en Pamplona son esos semáforos para vehículos que se ponen en rojo, pero que antes de que el semáforo peatonal también se ponga en rojo pasan a ámbar. Hay lugares en los que son durante todo el ciclo en verde peatonal, y otros en los que son los últimos 10 o 7s de tiempo para cruzar peatones. Esto sumado a que suelen estar colocados en intersecciones de grandes avenidas hace que cuando el coche más cercano al peatón cruzando está parado, tapa la visibilidad del coche del carril contiguo, que ve ámbar y avanza, atropellando al peatón, ciclista o criatura que ose cruzar en ese momento.

Cruce de Avda. Navarra con Avda. Barañáin. El semáforo se pone en ámbar cuando aún quedan 7s de verde para los peatones. Punto negro en el Mapa de Puntos Peligrosos de las Vías Ciclistas de Pamplona
5.- Distracciones
Se viene detectando, tanto en los accidentes urbanos, como en los interurbanos, un aumento de las distracciones al volante que empieza a ser preocupante. El uso del móvil al volante es masivo, y lo podéis ver a diario en cada semáforo, calle o ceda el paso. También en peatones y ciclistas. No tanto conversar, como sí chatear y teclear.

Fíjate en un semáforo, la gente baja la mirada para consultar el whatsapp de turno continuamente, y muchos teclean conduciendo. Son 200€ y 3 puntos del carnet, pero no parece que importe demasiado

6.- Relajación en las normas
El carnet por puntos tuvo su impacto cuando se implantó, pero su efecto se está relajando cada vez más. Están aumentando considerablemente el número de conductores bebidos y/o drogados. 

7.- Falta de educación
De todos. La gente cada día parece más que se piensa que está sola en el mundo y que "son sólo 5 minutos" es el comodín que permite todo. Peatones a su bola cruzando por cualquier lado, en rojo, verde o amarillo, ciclistas ídem, coches aparcados en cualquier lugar. Caos en los colegios por los propios padres que luego piden protección policial para sus hijos. Se nos va de las manos.

Quejas por la doble fila de los colegios en la zona de Monasterio de Urdax

8.- Ausencia de Brigada de Seguridad Vial en la Policía Municipal
Una de las medidas estrella de la legislatura de Enrique Maya, justificada en su momento incluso por los máximos mandos policiales en que el tráfico por la crisis había disminuido (mentira), fue eliminar de un plumazo al grupo humano de Seguridad Vial de la Policía Municipal. Esta brigada trabajaba prácticamente en exclusiva en materia de tráfico, controles, infracciones, etc. Sus componentes fueron movidos forzosamente a otros puestos, mayoritariamente en interior de edificios, y la brigada pasó de unos 25 efectivos a 4. Todo el trabajo realizado en las últimas décadas dejó de hacerse, recayendo en el resto de brigadas que trabajan en la calle (proximidad y protección) ya de por sí sobrecargadas de otros trabajos y con cada vez menos efectivos. Se ha resentido claramente el nivel de preocupación y dedicación en este respecto por la propia saturación de los efectivos con múltiples tareas distintas del tráfico. 
Tiempo después se recogen los frutos de aquellas medidas que dejaron ojipláticos a los policías de otras capitales de provincia, que no podían entender cómo se eliminaba una brigada básica en cualquier policía municipal. Para entendernos, es como que si en Urgencias no hubiera servicio de Traumatología. Pues esto sigue pasando actualmente en Pamplona, sin motoristas que controlen todo lo relativo al tráfico y la seguridad vial. Y cuanto más tiempo pasa, más degenera la ciudad, como ya llevamos cierto tiempo constatando. 

Ya no veréis policías con reflectantes en los tobillos y en motocicleta, que se encargaban de la seguridad vial de la ciudad

9.- Conflicto en Policía Municipal
Este cuerpo ha vivido en los últimos años situaciones muy convulsas, conflicto sindical, problemas jefatura-policías, expedientes indiscriminados, huelgas de bolis caídos, etc, que han hecho que se haya bajado mucho el nivel de control y vigilancia de las situaciones derivadas del tráfico. Unos policías por miedo a denunciar a determinado amigo de, otros por presionar a la administración al no poner denuncias, y muchos por hartazgo, ha derivado en una situación en la que ya no se trabaja con la misma intensidad que en tiempos pasados. Dicen las cifras no oficiales, porque las oficiales no las publican para no dar un indicador de conflicto, que las denuncias puestas por la Policía Municipal han disminuido un 80% en la última legislatura. Como consecuencia de esto es que ya no se controla igual los comportamientos al volante, se mira para otro lado cuando se ven ciertas situaciones, etc...
El tráfico de la ciudad está más asilvestrado que nunca y no hay intención desde el colectivo raso de policías de revertir esta situación, pues el conflicto sigue presente, a pesar del cambio de gobierno.
Las últimas noticias dicen que incluso hay una campaña de huelga a la japonesa, denuncias a todo trapo de la más mínima infracción, que tampoco ayudan a la situación de seguridad vial de la ciudad.
El papel de la Policía Municipal es clave para que se cumplan las normas y, por ende, para que la movilidad en la ciudad sea más segura. Si no se hace ese trabajo, como está pasando desde hace ya demasiado tiempo, vemos los resultados en las esquelas, hospitales y talleres de chapa y pintura.

10.- Bicefalia en materia de movilidad
Dos son las áreas que tienen su trabajo en la movilidad, Ecología Urbana y Movilidad, y Seguridad Ciudadana. El hecho de que al frente de cada una de ellas haya concejales de distinto partido, unido a una falta de coordinación manifiesta, e incapacidad de algunos más preocupados en copar portadas, hace que las actuaciones en materia de seguridad vial estén llegando tarde y con cuentagotas. Ultimamente se han colocado algunos guardias dormidos y lomas reductoras de velocidad en determinados puntos de la ciudad, como medida de lavado de conciencia ante los atropellos acaecidos en esos lugares, algunos de ellos mortales, como el de la calle Ermitagaña. 

Vecinos de la calle Ermitagaña se manifiesta por el atropello mortal que ocurrió en ese punto. Han colocado un guardia dormido, ¿habrán contentado a estos vecinos? Lo dudo

11.- Falta de valentía política
Es la causa última, y la que podría solucionar muchos de los males peatonales y ciclistas de la ciudad. La falta de bemoles políticos para cambiar la fisionomía de la movilidad urbana de Pamplona, unida a la falta de un plan claro de actuación para hacerlo hace que la situación se vaya poco a poco de las manos. No basta con anunciar medidas, cosa que llevan haciendo desde la primera víctima mortal atropellada de esta legislatura, copando bien de portadas y telenavarras. Hay que actuar, y hay que hacerlo ya.

Estas son algunas de las razones por las que la situación del tráfico en Pamplona se está yendo de las manos, aunque seguro que hay muchas más. De momento, seguimos con anuncios y declaraciones de intenciones, pero los muertos siguen in crescendo, al igual que los accidentes de tráfico, los atropellos, las alcoholemias positivas, etc. Aún estamos a tiempo entre todos de revertir esta situación y volver a cifras del pasado cercano, cuando en Pamplona nadie moría atropellado por moverse, pasear, jugar o divertirse.




2 comentarios:

  1. De acuerdo con el contenido del artículo solo matizaría la cuestión el aparcamiento en las inmediaciones de pasos de peatones. Eliminar algunas de estas plazas no soluciona el problema si sigue aparcando, como ahora, donde no hay plazas pintadas. Y es que sí hay pasos de peatones que no tienen plazas pintadas inmediatamente delante pero hay conductores que no tienen reparos en aparcar delante de un paso de peatones, algunos incluso en el propio paso de peatones, en curvas, cruces y sobre línea continua amarilla. La policía, bueno de la PM ya habláis. Por otra parte dos faltas de ortografía que estaría bien corregir: "hartazgo" y "hecho" con hache, ambas. En los puntos 9 y 10 respectivamente.

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  2. Totalmente de acuerdo. Sobre todo con el punto 7-falta de educacion. Circulamos, TODOS, como nos da la gana, queremos y nos apetece. Las normas se las exigimos a los demas, pero para nosotros son flexibles. Lo malo es que tememos más a la sancion que a perder la vida.

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